BASADO EN HECHOS REALES
CXLIII | COMO SOBREVIVIR LABORALMENTE A LOS MILLENNIALS?

Jose Manuel Hernando Llorens
Director Creativo Ejecutivo Aleggria Comunicación
(TIEMPO DE LECTURA APROXIMADA: 3 mins.)
Se denomina con este nombre a los que nacieron entre el 81 y el 95, y vivieron su juventud con el cambio de milenio. En la actualidad tienen entre veinte y treintaypocos años, y su irrupción en el mundo laboral ha sido un fenómeno al que todavía no nos hemos acostumbrado ni empresas, ni jefes, ni compañeros, ni nadie. Pero ni es tan fiero el león como lo pintan, ni tan corderitos como creemos. Veamos. Leamos…
Su principal peculiaridad es que se han criado con la tecnología, forma parte de su vida y no conciben el mundo sin internet. También son extraordinariamente sociables, ya que aunque sea de forma virtual, mantienen una interacción con su red de contactos intensa y constante. Se les critica mucho por su falta de madurez, su incapacidad para asumir compromisos, y su falta de convencionalismo. Están muy preparados académicamente, lo que les produce gran frustración al no verse reconocidos laboralmente. Y no consideran el trabajo un fin en sí mismo, sino un medio para vivir la vida.
Pero evidentemente es una franja de edad lo suficientemente amplia como para que no hay subdivisiones. De las que he visto, es el estudio de Carat el que más me ha llamado la atencióm. Así están segmentados según ellos:
Tren-Netters. El típico friki tecnológico con más relación virtual que real, siempre a la última tecnológicamente y buscando siempre nuevos gadgets para comprar.
After-Natives. Son más conservadores y tradicionales, muy celosos de su privacidad y sólo están conectados con un grupo reducido de personas.
Lifeprenuers. Son hedonistas y sofisticados, y les gusta tener un buen nivel de vida. En el trabajo son ambiciosos y muy competitivos.
Betablazers: Son persona en eterna búsqueda, siempre por delante de las modas, las tendencias o las opiniones. Son inconformistas y muy abiertos de mente.

Foto Original:
Cartel película «Millennium 2»
2009
Daniel Alfredson
Nadie sabe cómo serán cuando tengan edad para sustituirnos, pero lo que sí está claro es que tal y como muestran ahora, todo lo verán de forma completamente distinta a como lo vemos nosotros. Tal vez por eso les miramos de medio lado, porque nos molesta que ellos ni siquiera nos miren. Ahora todas las empresas buscan llamar su atención para incorporarlos en sus plantillas, pero no son un público fácil de engatusar.
Para empezar les llaman la atención las compañías que usan tecnologías punteras. Valoran en exceso que se invierta en su formación y desarrollo, y les gusta contar con un mentor que les dirija durante ese proceso. Son muy sociables y les parece atractivo el poder cambiar de departamento o incluso de país. Se muestran entusiastas con su trabajo pero no creen en el compromiso y son poco fieles. Además son muy idealistas, por lo que apuestan por compañías con compromiso medioambiental o responsabilidad social. Aborrecen los trabajos mecánicos y la rigidez espacio temporal. Y a pesar el paro que dicen afecta con fuerza a este segmento de la población, no admiten cualquier trabajo.
Con esta carta de presentación, no es extraño que hayan cambiado las reglas del juego para retener y atraer talento. En las entrevistas que he hecho en los últimos años para fichar equipo, cada vez me encuentro con más millennials. Lo que siempre me ha sorprendido es que más que convencerme para entrar en la agencia, parece que tengo que ser yo el que le ofrezca una oferta lo suficientemente atractiva para que lo considere como opción. Al principio me costó entenderlo, pero después de muchas entrevistas lo asumo como una evolución natural del mercado laboral.

Y entonces, qué se puede hacer para llamar su atención? Está claro que el dinero sigue siendo el principal argumento, pero no es el único. La posibilidad de conciliar vida personal y laboral con medidas de flexibilidad o teletrabajo es de lo más valorado a la hora de aceptar una oferta. Y como decíamos antes, les importa la huella positiva o negativa que su actividad y la de la empresa deje en el mundo o la sociedad. Y es que ellos ven el trabajo como algo más que como nosotros, y aunque muchos cuando éramos jóvenes pensábamos que un trabajo así era una utopía, para ellos es una certeza real.
Ser jefe de un millennial es complicado, pues tienden a no respetar demasiado las jerarquías ni los convencionalismos, pero hay algo peor, y es tener un jefe millennial. Los millennials se consideran justos, por lo que respetan el conocimiento que da la experiencia, y no la edad por sí misma. Tienen otra forma de enfrentarse a los trabajos, son más atajistas y huyen de los convencionalismos. Hablan otro lenguaje, se comunican de otra forma, tienen otros ideales, buscan los resultados por otros caminos. Si no les sigues el ritmo, si no compartes su entusiasmo y pasión, si no respetas su visión del trabajo, te llevarás mal seguro, y les estarás dando la razón.
Para terminar decir que si los Millennials te parecen extraños, hay que prepararse para los que le siguen. Les llaman la Generación Z y en estos momentos están terminando sus estudios para invadir el mercado laboral. No se si la Z es por Zombies, Zoquetes o porque con ellos se acaba el mundo, pero van a desbancar a los Millenials en menos de lo que canta un whatsapp. Ellos han incorporado la tecnología en su educación y han vivido con internet desde niños, y muchos trabajarán en profesiones que todavía no se han inventado. El cómo va a cambiar, más, nuestra realidad laboral, es algo que todavía no somos capaces de imaginar. Y entonces, serán los Millennials los que se quejen…
Porque esto es misterhello y estamos para eso, para hablar de comunicación interna de una forma diferente.¿Hablamos?