HABLANDO CON…
CXXIX | LA FORMACIÓN ACTORAL EN EL GRAN TEATRO DE LA EMPRESA

Javier Gil Valle «Javivi»
Actor & Consultor & Coach Actoral empleados & Director y coordinador mejoratumarcaempresarial.com
En el gran teatro del mundo todo vale, y en la empresa más te vale que tengas bien aprendido tu papel, y lo representes con corrección y acierto. Hoy en misterhello contamos con un invitado de excepción, Javier Gil Valle (más conocido como Javivi) que combina su carrera de actor con la de coach, ponente y formador. Su especialización es la de entrenar a equipos de trabajo y profesionales con herramientas actorales para mejorar la comunicación, estimular la motivación o potenciar la co-creación. En este post comparte parte de las técnicas y motivaciones que usa en sus sesiones, y reflexiones certeras para mostrar su eficacia y necesidad. Veamos. Leamos.
El entrenamiento actoral/ teatral no es solo para actores profesionales; es válido y necesario para cualquier profesional y equipo de trabajo. Al igual que en una obra de teatro o una película, cada actor debe conocer a la perfección las características de su personaje, la interacción que ha de tener con el resto de personajes, la historia que va a representar, los límites de su interpretación, los escenarios sobre los que se va a mover, las pautas que ha establecido el director…
Es por ello que el entrenamiento actoral se puede convertir en un factor determinante a la hora de destacar de forma eficiente en un mercado tan competitivo como el actual. Básicamente esta técnica consiste en preparar y trabajar cuerpo y mente para gestionar comportamientos y acciones que ayuden a alcanzar un objetivo común. Por supuesto no hablamos de convertir a las personas en autómatas o en algo que no son, sino más bien en sacar lo mejor de cada uno para convertir cualquier acción en un éxito de crítica, y público.
Una de las claves para la formación actoral es el trabajo en equipo. Por muy pequeño que sea un papel en una obra, ya sea como protagonista, reparto o incluso figurante, todos forman parte de un engranaje perfecto con una coherencia lineal y preestablecida, y cualquier disfunción puede destruir el resultado final. Al igual que en la vida real, no siempre hay posibilidad de volver a rodar o salir al escenario. Lo hecho hecho está. Y a lo hecho, pecho.

Foto Original:
Cartel película «The Artist»
2011
Michel Hazanavicius
Otro elemento importante es el establecimiento de límites reales. Igual que un profesional, el coto de un actor dista mucho de estar donde cada uno cree que se encuentra. Es importante conocer las limitaciones reales para sobre ello, detectar las áreas de mejora y evolucionar. En las dinámicas de grupo que hacemos, cada uno expone al resto del grupo sus aspiraciones y limitaciones para que entre todos, hagan crecer ese espíritu de superación. Estas técnicas de gestión emocional además de ser muy efectivas para conocerse, son una gran estrategia para acercar a las personas y fomentar el trabajo en equipo y las sinergias.
Además hablamos de sacrificio. Al igual que en las arte escénicas, mantenerte en tus marcas profesionales o crecer a partir de ellas conlleva mucho esfuerzo. Los momentos de dolor ocurren cuando no se ven cumplidas las expectativas o las promesas con que se contaba. Un actor no puede tener un mal día y salir al escenario enfadado a hacer una comedia. Un profesional tampoco. Su público que son sus clientes, deben llevarse la mejor experiencia de marca posible, con lo que el entrenamiento de las emociones a través de técnicas teatrales a veces es fundamental para mantener unos estándares de calidad constantes y aceptables en el tiempo. Reducir el decaimiento, la negatividad, el automatismo, la desidia es algo posible con entrenamiento…

Mi experiencia me ha demostrado que el entrenamiento actoral va más allá de la búsqueda de resortes para conseguir la máxima excelencia con el cliente. Una formación adecuada favorece la implementación y mantenimiento de estrategias de comunicación interna ya que fomenta y mejora aspectos como la experiencia del empleado, la resolución de conflictos, los procesos de trabajo, la salud emocional… Para ello es importante estar dirigido por un profesional reputado, capaz de usar una metodología adecuada adaptable a cada grupo, y que incluya perfiles profesionales multidisiciplinares para que la experiencia formativa sea más enriquecedora.
Igual que un gran profesional, un gran actor es aquel que el personaje trasciende a la persona. Como todos vosotros, yo también soy cliente, y en cualquier transacción comercial siempre he valorado la forma en que las personas que tengo enfrente me hacen vivir la experiencia de marca. Su tono, su expresión corporal, su capacidad improvisativa, la modulación de su cordialidad, todo ello es un nivel actoral que se puede desarrollar y que es determinante para cerrar con éxito cualquier transacción comercial. Mi misión es ayudar a que así sea, y cuando algo que he trabajado con una compañía lo veo reflejado como cliente en el trato, me llena de orgullo. Y es que siempre hay un antes y un después al enfrentarte a tu yo actor. Y la diferencia en cuento a vivir y hacer vivir la marca, es abismal…
Porque esto es misterhello y estamos para eso, para hablar de comunicación interna de una forma diferente.¿Hablamos?